Este año llegaba con muchas ganas a la carrera de ECI, en bastante buena forma y con un objetivo claro: batir a mi "yo" de hace 20 años (es decir, rebajar una marca de 39'07").
El recorrido tenía ligeras diferencias con años anteriores debido a las obras del metro entre otros motivos. La salida sería en el Paseo del Parque en lugar de frente a El Corte Inglés; no se subiría toda la Avenida de Andalucía hasta comisaría, sino que en el Puente de las Américas nos desviaríamos para subir por la Avenida de Herrera Oria (con un desnivel un poco más pronunciado que en el anterior trazado) hasta Carranque; en el tramo final, en lugar de subir toda la cuesta de Capuchinos hasta Fuente Olletas, nos desviaríamos a mitad de Capuchinos para subir una cuesta pronunciada hacia el conservatorio de música y bajar luego hacia la Plaza de la Victoria; y por último, a la salida del túnel de la Alcazaba, en lugar de pasar por detrás del ayuntamiento y hacer una "S" para entrar a meta en el parque, se salía directamente hacia la recta de meta en el Paseo del Parque.
Hice un test una semana antes, con tráfico, pasos de peatones, y circulando casi todo el tiempo por la acera, para hacerme una idea sobre los tramos que cambiaban. 41'47", con 10000 bastante bien medidos, empezando y terminando en la puerta del ayuntamiento, y a la hora de comer (ese día hacía bastante calor). Contento con el test.
El día se presentaba con buenas condiciones para correr, sin un calor excesivo y parcialmente nublado. Claudia también iba a correr con una amiga, hasta el km 6 donde se encontraría con la carrera corta en la que entrarían los niños con la abuela, y ya irían caminando y trotando hasta la meta. Mi idea era completar la carrera, avituallar, y volver por el recorrido hasta encontrarlos y volver con ellos.
En primer lugar, encuentro con los Bichos y foto oficial!
Pequeño calentamiento, y rápidamente a buscar sitio en la salida, lo más cerca posible de la parte delantera. Hay suerte, me coloco prácticamente en la valla que separa al cajón de federados, de los populares.
Unos segundos antes de la salida, se abre la valla de separación y los populares nos acercamos a los federados en la línea de salida. Dos de los que estaban a mi alrededor sueltan codazos y meten el cuerpo por delante para situarse antes que yo en la salida. Me da vergüenza ajena, y les dejo que se pongan delante, no hay problema, y no me voy a desconcentrar por semejante tontería.
En cuanto suena el pistoletazo salgo disparado, buscando huecos entre la gente para pasar. No tengo demasiada gente delante, pero el grupo de federados es bastante numeroso y no todos van a un gran ritmo. Debo tener por delante a unos 500 corredores aproximadamente. Poco antes de llegar al Puente de Tetuan, encuentro delante mía a un corredor corpulento que va a buen ritmo abriendo camino, me pego detrás de él para aprovechar su "trabajito"; una vez que llegamos a una zona más despejada de corredores en la avenida de Andalucía, lo paso y sigo progresando.
Llegamos a la subida de Herrera Oria, 1 km con una pendiente no demasiado pronunciada pero continua (durante todo el 3er km de carrera). Ahí es donde más corredores adelanto. Giramos en Carranque, y en seguida empezamos a bajar por la avenida de Carlos Haya (ahí, una vez recuperado el aire del esfuerzo de la subida, me lanzo a toda velocidad). Durante la bajada no adelanto a demasiados corredores, es normal, vamos todos a tope y ya no quedan tantos corredores por delante, y los que hay tienen un nivel sobresaliente. En la subida de Eugenio Gross y Blas de Lezo vuelvo a adelantar a algunos corredores.
Tengo muy buenas sensaciones a pesar de ir a ritmos impensables para mí incluso en los entrenos de series. Siempre tengo ese plus de motivación en las carreras y voy bastante bien a ritmos más rápidos de lo habitual. En la avenida delante del Hospital Materno, y luego en la ligera subida hacia la Rosaleda, vuelvo a ir a tope. Llegando a la explanada y el puente de Martiricos, nos encontramos con la gente que está esperando para tomar la salida de la carrera mini, hay muchísimo ambiente. Hay también muchos Bichos que van a hacer esa carrera con la familia, los saludo, y recibo sus ánimos, que me vuelven a poner las pilas para afrontar el tramo final de carrera con energía.
Al girar a la derecha tras cruzar el puente, para empezar en ligera bajada junto al río, diviso unos 60 u 80 metros por delante a Juan (Corredor Errante). Me extraña mucho porque creo que su tiempo en 10k es inalcanzable para mí. Pero el hecho de tenerlo tan cerca me da otro puntito de motivación, e intento no perderlo de vista. Empezamos a adentrarnos ya en el centro de la ciudad.
Realizo sin problemas los tramos de subida por Capuchinos, y la calle hacia el conservatorio, puesto que ya los había reconocido unos días antes y no me pillaban por sorpresa. Se vuelve a repetir lo ocurrido en las subidas anteriores, y otra vez adelanto a algunos corredores. Ya desde ahí son 2 kilómetros con pendiente favorable hasta la meta. A tope!!!
A la altura de la Plaza de la Merced, justo antes de girar hacia el túnel de la Alcazaba, me adelanta un corredor que parece que está esprintando como si la meta estuviera cerca. Lo está, pero sé que aún queda todo el túnel (que se hace largo si vas esprint), y una recta de meta bastante larga, es decir, quedan unos 800 metros de carrera.
Me pego a él, y consigo pasarlo dando la curva hacia la recta de meta, justo después de pasar el túnel. Ya diviso la meta, no quiero ni mirar el reloj, sé que voy muy bien, acelero progresivamente todo lo que puedo, y cruzo la línea de meta! Paro el crono en 38'02", toma ya, MMP!!! Espectacular, super feliz!!! Clasificado el 84º en la general, 14º en mi categoría.
Tras cruzar, me encuentro por allí a Rubén Lirio (mi míster en la preparación de la Maratón de Málaga), a Fernando Hardasmal, al minuto llegan también Jesús Carvajal, y Javi (compañero de los Bichos, que venía de correr el día anterior una trail), y poquito después llega Pablo (otro compañero Bicho haciendo su MMP). Nos saludamos, intercambiamos impresiones, tomamos algo de isotónica y agua, y en pocos minutos comienzo a caminar de vuelta por el recorrido buscando a la familia. Por el camino me voy cruzando con compañero/as a quienes voy saludando y animando.
Por fin, los localizo en la parte alta de calle de la Victoria. Bajamos hacia la meta entre pequeños acelerones de Gael, y tramos caminando. Es un recorrido largo para que él lo pueda hacer corriendo todavía; y Milo va en su carrito. Cruzamos la meta todos juntos, estos momentos son geniales! :-)
Ha sido una carrera divertida, y personalmente muy satisfactoria. Hace unos meses no me hubiera imaginando corriendo 10 kms a una media de 3'48"/km. Esto me da un refuerzo de confianza para continuar la preparación de la maratón de Málaga, y para seguir disfrutando de más carreras así. He vencido a mi "yo" de hace 20 años! Ou yeah!!!
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